Este año, la Fiesta Mayor de Viladecans no será un espacio de reencuentro social, pero la ciudad quiere mantener parte del espíritu festivo y cultural que caracteriza a la celebración. Sin actos multitudinarios, buena parte de la fiesta se traslada a casa y sólo habrá tres escenarios con actos de pequeño formato si las circunstancias sanitarias lo permiten.
Pregón de Fiesta Mayor '20
Dedicado y protagonizado por la ciudadanía, los y las que han enfrentado el virus desde primera línea y todos y todas las que han hecho posible que sigamos haciendo nuestra vida durante el estado de alarma.
La Fiesta Mayor se reinventa
Para adaptarse a las circunstancias por el COVID-19, la Fiesta Mayor de este año se reinventa. Nada será igual, pero la cultura se continuará palpando en el ambiente estos días. No habrá conciertos multitudinarios ni feria de atracciones. Tampoco se podrá disfrutar de las emblemáticas actividades de cultura popular ni del piromusical que nos reunía en el parque de la Marina cada año. Pero la llama no se apaga, resiste. Esta Fiesta Mayor quiere ayudar a reactivar la ocupación cultural, especialmente en Viladecans –porque la celebración es más local que nunca–, y también busca aportar un poco de salud emocional a la gente mayor, a los más pequeños y a los jóvenes, que vivieron, especialmente, la dureza del confinamiento.
Escenarios Online
Para evitar las multitudes, se ha diseñado una Fiesta Mayor segura, sin riesgos. El gran escenario musical –que apuesta por los músicos y bailarines locales–, se traslada a las casas a través de las redes sociales, igual que el popular pregón de inicio de celebración. También en casa, desde balcones y ventanas, se podrán vivir unos fuegos artificiales adaptados –más elevados y lanzados desde varios puntos– y unos espectáculos itinerantes que a última hora de cada tarde recorrerán las calles montados sobre una carroza.
3 escenarios presenciales
El patio de la Escuela El Garrofer será el escenario de espectáculos pensados para la gente mayor: audición de sardanas, cabaré, habaneras, rumba catalana y mucho más. En el parque de Can Xic, habrá espectáculos infantiles, con títeres, espectáculos de magia y payasos, entre otros. Y en los jardines de Magdalena Modolell, una programación musical de pequeño formato –con mucho artista en acústico, bandas tributo y de versiones– y muy pensada para jóvenes con hip-hop y reggae. Las entradas– con un donativo de un euro y destinado a la cuenta bancaria contra la COVID-19 del Hospital de Viladecans– se podrán adquirir a partir del 1 de septiembre en las taquillas del teatro Atrium Viladecans y en su web. Cada persona podrá comprar un máximo de 6 entradas.
