El caluroso mes de mayo ha avanzado la llegada oficial del verano. Como cada año, la playa local se ha puesto a punto para recibir esta estación.
El aparcamiento de la playa del Murtra, el Ayuntamiento ha optimizado este año al máximo la ordenación del espacio para sumar 40 plazas más a las cerca de 400 que había el verano pasado, dentro del espacio limitado del que se dispone al estar en una zona de alto valor natural y propiedad del ente aeroportuario AENA.
Desde el 4 de junio se puso en marcha la regulación del aparcamiento, que funciona todos los días de 8 a 20 horas hasta el 18 de septiembre. Esta medida permite una correcta regulación de la movilidad a la zona ante la presión de vehículos en la época estival y, a la vez, busca desincentivar la presencia de vehículos foraneos, que este año pagarán seis euros frente al simbólico euro que pagan los residentes. La recaudación permite sufragar parte del coste del servicio de control y vigilancia del aparcamiento, que también se encarga de la limpieza de los lavabos de la playa.
El bus, desde el 11 de junio
Dada la limitación del aparcamiento, una buena opción es utilizar el autobús para ir a la playa. Y más los fines de semana: porque el aparcamiento se llena más y más temprano y porque el servicio de buzo es gratuito. El Ayuntamiento asume el coste para garantizar el acceso de la ciudadanía de Viladecans al litoral local. El Vilabús a la playa, el VB4, se pone en funcionamiento este verano antes que nunca: a partir del 11 de junio. Ofrece, cada día, cinco expediciones por la mañana y otros cinco por la tarde en cada sentido. Los horarios no varían respecto al año pasado: salidas en las horas en punto de la ciudad y en las medias horas desde la playa. El VB4 estará en servicio hasta el 4 de septiembre, a las puertas del retorno del curso escolar.
Servicios a pleno rendimiento
Una vez en la playa, la principal novedad de los servicios es que las duchas volverán a funcionar a pleno rendimiento, después de que el estallido de la pandemia aconsejara desactivar la mitad de los surtidores para mantener las distancias personales.
El servicio de salvamento y socorrismo estará activo del 17 de junio al 4 de septiembre, de 10 a 19 horas. A lo largo de más de un kilómetro de las playas de la Murtra y de la Pineda, senyalizadas con las boyas amarillas en el mar, cinco socorristas vigilarán en todo momento los bañistas. Como ya es habitual, las personas con mobiltat reducida podrán solicitar en el lugar de socorro la silla o las muletas amfibios.
El servicio de salvamento realizará también una tarea de información preventiva para minimizar los riesgos por la exposición al sol o las picaduras de animales marinos, así como algunos talleres durante julio. Además, el servicio permite que se pueda consultar por Internet el estado de la playa en tiempos reales, a través de los webs del Ayuntamiento y del área Metropolitana de Barcelona (AMB).
Espacio de alto valor natural
La singularidad natural de las playas locales es uno de sus grandes atractivos y, a la vez, un valor que hay que preservar. El compromiso ciudadano es clave para que el uso lúdico sea compatible con la cura ambiental. Por eso, es bien importante no acceder a las dunas, unos ecosistemas muy importantes para evitar la regresión de las playas. De hecho, el trabajo de la AMB y y los ayuntamientos para cuidar las dunas es candidato a la segunda edición de los premios New European Bahuhaus, que organiza la Comisión Europea para reconocer las acions con proyección ambiental e implicación social.
Precisamente, en esta línea trabajará un nuevo proyecto que, gracias a una subvención europea del programa Horizon Europe, hará una radiografía de la biodiversidad en las playas metropolitanas a través de la participación ciudadana.
Además, hasta el 31 de julio, no se permitido el acceso en la playa del Remolar, la más próxima al Prat, para favorecer la nidificación de aves en peligro. Estos es una de las dos playas, junto con la de Cal Francés, reconocidas con la distinción de Playas Verges por parte de Ecologistas en Acción.
Nuevo vehículo policial
La Policía Local estrena este verano un nuevo vehículo para mejorar y hacer más sostenible su presencia en todas las playas locales. Se trata de un buggy 100% eléctrico idóneo para prestar servicio a pie de arena y muy adecuada para un espacio de alto valor natural al ser no contaminante.
El vehículo cuenta con tracción a las cuatro ruedas, sistema de luces prioritarias, maletero para llevar material –como cinta o conos que faciliten las tareas policiales necesarias–, así como sistema de megafonía, favoreciendo la difusión de mensajes a las personas usuarias, por ejemplo para tirar advertencias o órdenes a aquellas que están adentro del agua.
A lo largo del verano, la policía está bien presente en la playa para atender tanto la seguridad ciudadana como el control de las normativas. Por ejemplo, hay que destacar que está prohibido pisar las dunas protegidas, así como llevar perros a la playa en cualquier momento del día. Y solo se puede pescar desde el espigón, nunca en la arena, y exclusivamente de 8 de la tarde a ocho de la mañana.
La compra del nuevo vehículo policial buggy no ha sido motivada solo pensando en la época estival, sino que es un magnífico elemento de trabajo para el nuevo Servicio de Medio Ambiente de la Policía Local que se ha creado este año 2022 y que permite también velar por la seguridad y los buenos comportamientos en las zonas agrícolas y forestales del municipio. Así, el cuerpo policial podrá velar mejor ante actuaciones como la circulación de vehículos por zonas prohibidas, vertidos, botellots, caza no autorizada, así como hacer una mayor tarea preventiva por tal de evitar hurtos y robos en la zona agrícola estableciendo un nexo de proximidad con el campesinado.
