Productos de proximidad y km 0
La recuperación económica pasa por la recuperación del comercio y la restauración, sectores muy castigados por la pandemia a causa de las restricciones marcadas por las autoridades sanitarias, que comportan medidas y protocolos cambiantes que han reducido los ingresos. El apoyo para hacer frente a esta situación e incentivar el consumo en los establecimientos locales, destacando sus valores y concienciando las personas consumidoras de las ventajas desde la perspectiva de la sostenibilidad y del apoyo a la ocupación son muy necesarios. Para incentivar el consumo se cuenta con la moneda local Vilawatt, que hay que continuar impulsando.
Así mismo, las asociaciones empresariales locales de referencia de ambos sectores de actividad necesitan recursos para incrementar la gestión de sus planes de actuación, consensuados y en coordinación con el Ayuntamiento, para continuar fomentando los establecimientos comerciales e incidir positivamente en la recuperación.
La pandemia, también ha ocasionado (y puede seguir causando) el cierre de establecimientos, un hecho ante el cual hay que favorecer el emprendimiento y facilitar el acceso a los locales vacíos para preservar el continuo comercial.
Por otro lado, los productos agroalimentarios locales constituyen un recurso de primer orden al alcance del pequeño y medio comercio en la adaptación a los futuros modelos de consumo, de innovación tecnológica, y de distribución preocupada por la sostenibilidad. A pesar de ser conscientes del potencial del producto de proximidad, el comercio y la restauración locales tienen que poder aprovechar la oportunidad de desarrollar circuitos cortos de comercialización para aportar mayor valor a sus clientes y mejorar sus resultados empresariales.
Viladecans constituye un caso paradigmático. Mantiene una considerable superficie agrícola, en buena parte incluida dentro del espacio protegido del Parc Agrari del Baix Llobregat, donde se produce una enorme cantidad de productos de reconocida calidad, pero estas se vehiculan mayoritariamente hacia el comercio mayorista.
Es necesario, por lo tanto, encontrar fórmulas que superen esta dificultad que se plantea en el día a día de la comercialización del producto Km 0 en la hostelería y el comercio locales: reorientar el modelo comercial porque el producto de proximidad constituya un elemento clave, diferenciador y de atracción, que contribuya de manera clara a la consolidación y el impulso del tejido comercial urbano, los mercados y la restauración.
Actuaciones
La moneda local es dinero electrónico (con equivalencia de 1 W = 1 euro) de uso exclusivo ya en los establecimientos de la ciudad. Esta herramienta fomenta el comercio local contribuyendo a la economía circular mediante su uso y sus promociones tan públicas (como los “bonos VILAWATT” aprobados en 2020, que pueden seguir ampliándose) como del propio colectivo comercial.
Campañas para promocionar los establecimientos comerciales de proximidad en diferentes apoyos: opis, carteles, redes sociales, prensa...
Información y acompañamiento a los establecimientos comerciales y de restauración para la adopción de las medidas sanitarias establecidas en cada momento por las autoridades sanitarias competentes.
Se llevarán a cabo acciones de visualización, promoción y venta de las frutas, verduras frescas y otras hortalizas en establecimientos comerciales. También se fomentará el uso de estos productos agrarios en los establecimientos como bares y restaurantes.
Apoyo para recurso técnico a las asociaciones (Red Comercial y Gremio de Hostelería) para que tengan ayuda para desarrollar sus planes de trabajo de recuperación económica.
Las asociaciones podrán contratar un apoyo técnico que apoye a su gestión.
Creación de una base de datos de locales desocupados acercando la información de sus características a emprendedores/as con nuevos proyectos empresariales de los sectores del comercio y la restauración. Intermediación entre propietarios y emprendedores/as.
OBJETIVOS DE DESARROLLO SOSTENIBLE A LOS QUE HACE REFERENCIA ESTA MEDIDA
