La congelación de los tributos no impedirá el aumento presupuestario para hacer frente a la crisis, gracias al uso del remanente municipal.
Las ordenanzas fiscales de Viladecans seguirán en vigor durante 2021. No habrá, por lo tanto, subida en ninguno de los precios públicos, tasas ni impuestos municipales. Así lo ha decidido ya el Gobierno Municipal que, aun así, trabaja en unos presupuestos expansivos para 2021, que tienen que aprobarse por el Pleno Municipal en diciembre. Unos presupuestos que afrontarán de manera directa la crisis económica y social causada por la pandemia.
El Pleno municipal de noviembre, celebrado ayer, aprobó una modificación de partidas presupuestarias que permitirá que el incremento de ingresos para sustentar los presupuestos de 2021 llegue a través del uso de los remanentes municipales y no por la vía del aumento de impuestos. Esta redestinación de capital que hubiera ido solo a la amortización de préstamos, se puede hacer gracias a la suspensión de las reglas fiscales de los ayuntamientos aprobada por el Gobierno de España. De este modo, 3.767.102 euros de remanente municipal podrán utilizarse para afrontar las consecuencias de la pandemia, tanto desde la gestión directa municipal como desde las empresas municipales.
La deuda municipal de Viladecans es actualmente de cerca del 19%, la más baja de los últimos años. La suspensión de las reglas fiscales también permitirá un mayor endeudamiento municipal que otros años para destinarlo a nuevas inversiones.
Exención de la tasa de terrazas de bares y restaurantes
El Gobierno Municipal también calcula que el 2021 dejará de ingresar unos 180.000 euros al ampliar en el año próximo a la hostelería la exención de la tasa que paga para ubicar sus terrazas en el espacio público. Esta medida se aprobó en octubre para dar continuidad a la decisión tomada este 2020 para apoyar al sector a hacer frente al impacto de la COVID.
