La sostenibilidad hace parada en las escuelas con el BiciBús

Familias de las escuelas Martí i Pol y Mediterrània participan en una prueba de BiciBús escolar que ya se realiza en otras ciudades. De forma similar a lo que ocurre con los autobuses escolares, una ruta con diferentes paradas va sumando a una comitiva sobre dos ruedas, a escolares y los familiares que los acompañan, que acuden con sus bicis a ese punto de encuentro. Así funciona el Bicibús escolar, una iniciativa por una movilidad grupal, sostenible, saludable y segura que se puso en marcha a finales de abril y anima a las famílias a usar la bici en lugar del coche en su camino al colegio.  

El Ayuntamiento y la empresa local Bikebitants animaron a la comunidad educativa a formar parte de esta iniciativa promovida por la Oficina de la Bicicleta, del Àrea Metropolitana de Barcelona (AMB). El proyecto se concretó con una experiencia conjunta de las asociaciones de familias (AFA) de las escuelas Miquel Martí i Pol y Mediterrània, dos centros vecinos situados en el parque de Torre-roja. Así, se ha diseñado la ruta de la caravana ciclista en función de las familias que se han apuntado de inicio: dos recorridos que salen de dos parques, el del Torrent Ballester y el de la Marina, y se unen en un tercero, el de la Riera. La ruta se realiza básicamente por ciclocalles o carriles bici. Las familias tienen a su disposición una app para inscribirse y también han recibido formación sobre conducción segura.  

Durante los tres primeros viernes, la cooperativa Biciclot, que ha ayudado a montar bicibuses escolares en otras ciudades, realizó un acompañamiento. Con todo ello, las entidades familiares han sentado las bases para continuar con la iniciativa de forma autónoma e ir ajustándola a las necesidades. De hecho, el objetivo de esta experiencia es servir de inspiración a las familias de la ciudad para empezar a hacer un cambio en los modos de desplazamientos cotidianos, implicando también a los más jóvenes de la casa. 

Una amplia red ciclable en la ciudad

La red ciclable local es el equivalente a la distancia entre Viladecans y Granollers o Vilafranca del Penedès. Cincuenta kilómetros de carriles bici y ciclocalles que facilitan unos desplazamientos sostenibles, saludables y seguros en bicicleta, patinete eléctrico u otros vehículos de movilidad personal. 

Además, la red crecerá próximamente. Este mismo año incorporará un carril bici en la comarcal, una infraestructura que dará un gran valor porque la conectará con las ciudades vecinas e incluso, más adelante, con el metro en Cornellà. También en un futuro próximo el nuevo barrio de Llevant, ahora en construcción, y un carril bici a la vecina población de Sant Climent ampliarán la red hasta alcanzar los cerca de sesenta kilómetros